En marketing digital, un lead no es simplemente un contacto: es el punto de partida de una posible venta. Saber quién es realmente un lead, cómo se clasifica y qué estrategias lo convierten en cliente es clave para que tus esfuerzos comerciales tengan impacto real.
Un lead en marketing es una persona o empresa que ha mostrado interés en tu producto o servicio, generalmente a través de una acción concreta: completar un formulario, descargar un recurso, registrarse a un webinar, etc. A partir de ese momento, deja de ser un visitante anónimo y se convierte en un contacto con el que puedes iniciar una relación comercial.
La generación de leads es una etapa clave dentro de la estrategia de marketing, ya que es el punto en el que se capta ese primer interés y se transforma en un contacto identificable.
Este proceso es fundamental porque determina la calidad de los prospectos que se canalizan hacia el equipo de ventas. Cuanto mayor sea el interés y la afinidad del lead con tu oferta, mayores serán las probabilidades de concretar una venta.
No todos los leads tienen el mismo nivel de interés o están en la misma etapa del proceso de compra. Aquí es donde entran en juego las clasificaciones para diferenciar y optimizar el trabajo conjunto de marketing y ventas. Por eso es fundamental diferenciarlos:
Es importante aclarar este punto, ya que, especialistas del marketing digital manejan las siguientes nomenclaturas en su estrategia según el tipo de lead: MQL y SQL, que no es otra cosa que Marketing Qualified Lead (lead calificado de marketing) y Sales Qualified Lead (lead calificado de ventas) respectivamente.
MQL y SQL pertenecen a las etapas de un funnel de conversión, es decir, el proceso de captación del interés de un usuario hasta que se convierten a leads, y posteriormente en clientes.
Es común confundir estos términos, pero representan fases distintas en el viaje del comprador:
Prospecto (o visitante): Es una persona que aún no ha interactuado directamente con tu marca de forma que puedas identificarla. Podría ser alguien visitando tu sitio web por primera vez, viendo tus publicaciones en redes sociales o pasando frente a tu tienda física. Son anónimos y su interés es incierto.
Lead: Como definimos antes, es un prospecto que ha mostrado interés y ha proporcionado sus datos de contacto a cambio de valor. Ahora es un contacto conocido con el que puedes iniciar comunicación.
Un MQL no necesariamente está listo para comprar. El Instituto de Investigación en Marketing, Marketing Sherpa, afirma que 79% de los leads en marketing nunca se convierten en ventas.
Para que un lead de marketing se convierta en venta deben estar alineadas las estrategias tanto del equipo de marketing como el de ventas. De no alinearse estos dos equipos la empresa desperdicia presupuesto y recursos.
De ser el caso contrario; es decir, de existir esta alineación, Grupo Aberdeen, especialistas en estrategia e investigación en temas de marketing, asegura que:
Entonces, ¿cómo se convierte un lead en venta?
La generación de leads de calidad es un arte y una ciencia que requiere una estrategia bien definida y alineada entre marketing y ventas.
Hay algunas estrategias para conseguirlo:
Convertir un lead de marketing en una venta es un proceso que va más allá de una simple transacción; implica construir una relación, entender las necesidades del cliente y ofrecer la solución adecuada en el momento oportuno.
Con una estrategia de generación y nutrición de leads robusta y una alineación efectiva entre marketing y ventas, el potencial de crecimiento de tu negocio es enorme.